En Londres, moverse en silla de ruedas es factible con varios medios de transporte. El autobús urbano es la opción preferida, siendo gratuito para usuarios de sillas de ruedas. El tren accesible es la Docklands Light Railway (DLR), aunque algunas estaciones pueden necesitar asistencia. Los taxis adaptados (Black Cabs) están equipados con rampas y aceptan una silla por viaje. El ferry por el Támesis es otra opción, y el metro, aunque no perfectamente accesible, mejora continuamente. Planificar bien las rutas es esencial para ahorrar costos y evitar inconvenientes.