Viajar a Estambul en silla de ruedas no solo es posible, sino que es una experiencia enriquecedora y vibrante. Esta ciudad única, donde se cruzan Oriente y Occidente, rebosa de historia, cultura y una energía sin igual. Por ello, y a pesar de que la accesibilidad puede presentar desafíos en muchos lugares, Estambul ha hecho avances significativos en este aspecto.